LA IMPORTANCIA DE LA ORACIÓN

Salmo 6

Jehová, no me reprendas en tu enojo, Ni me castigues con tu ira. Ten misericordia de mí, oh Jehová, porque estoy enfermo; Sáname, oh Jehová, porque mis huesos se estremecen. Mi alma también está muy turbada; Y tú, Jehová, ¿hasta cuándo? Vuélvete, oh Jehová, libra mi alma; Sálvame por tu misericordia. Porque en la muerte no hay memoria de ti; En el Seol, ¿quién te alabará? Me he consumido a fuerza de gemir; Todas las noches inundo de llanto mi lecho, Riego mi cama con mis lágrimas. Mis ojos están gastados de sufrir; Se han envejecido a causa de todos mis angustiadores. Apartaos de mí, todos los hacedores de iniquidad; Porque Jehová ha oído la voz de mi lloro.  Jehová ha oído mi ruego; Ha recibido Jehová mi oración. Se avergonzarán y se turbarán mucho todos mis enemigos; Se volverán y serán avergonzados de repente.

El Salmo 6 es una de las tantas oraciones que pronuncio el rey David, el acostumbraba a orar mucho, los salmos son una gran muestra de ello, en su mayoría son oraciones que el elevo a Dios.

La oración es nuestro canal de comunicación con Dios, es fundamental mantener el habito de hablar con el señor, el desea que todas nuestras situaciones las presentemos delante de su presencia por medio de la oración; la biblia está llena de ejemplos, los grandes hombres de Dios nos enseñan lo fundamental de la misma, Daniel oraba tres veces al día y en una de estas oraciones recibió la revelación de la profecía de las 70 semanas, para ese entonces llevaba 21 días en oración y ayuno por ese propósito en especial, interesante verdad; Moisés hablada con Dios a diario tanto que la palabra incluso dice que hablaba como si estuviera cara a cara con Dios, a este nivel debemos llegar.

Es la oración de vital importancia para nuestra vida, que el mismo señor nos dio un ejemplo descriptivo de como orar al padre en Lucas 11, incluso fue mucho más allá, los evangelios nos relatan que en muchas y constantes ocasiones se separaba de los discípulos y tenía un tiempo de oración aparte con el padre.  En Marcos 14 podemos encontrar una muestra muy visible de esto, poco tiempo antes de su arresto el señor fue al Getsemaní con los discípulos y tubo tres periodos de oración de más de una hora cada uno, en el cual sabemos que se fortaleció para enfrentar su arresto y muerte en la cruz.

Ahora la oración no debe ser utilizada para tratar de persuadir al señor hacia nuestro parecer o deseo personal, la oración es el medio por el cual nosotros podemos menguar par que crezca Dios y aceptamos su voluntad por medio de la misma, así esta esté en contravía de lo que queremos nosotros, aprendamos del señor Jesús, cuando dijo, padre que no se haga mi voluntad si no la tuya.

La palabra nos das una guía muy clara de cómo orar:

Mateo 21:22 Y todo lo que pidiereis en oración, creyendo, lo recibiréis.

Santiago 4:3 Pedís, y no recibís, porque pedís mal, para gastar en vuestros deleites.

1 Juan 5:14 Y esta es la confianza que tenemos en él, que si pedimos alguna cosa conforme a su voluntad, él nos oye.

Analicemos estos tres pasajes bíblicos, Mateo nos indica que en oración podemos recibir lo que pedimos, pero Santiago nos exhorta por que pedimos mal y por eso no recibimos, pero Juan nos da la profundidad de esta enseñanza, la cual radica fundamentalmente en que nuestras peticiones deben ajustarse a la voluntad de Dios 1 Juan 5:14 y de esa manera tendrá efecto lo dicho por Mateo.